Cuando aún se está viviendo alrededor de todo el mundo una completa incertidumbre, sin saber que esperar del futuro cercano, muchos ponen su esperanza en el sistema de salud global o ayudas económicas que les pueden ofrecer sus gobiernos. Todo puede ayudar, pues todos, cual mas cual menos, hemos sido afectados por lo que estamos viviendo, pero nada parece suficiente y muchos han perdido la esperanza.
Aquí cabe hacernos la pregunta como creyentes: ¿Qué esperamos del futuro, en dónde o en qué tenemos puesta nuestra esperanza? Les queremos animar a que tomemos una resolución, no una momentánea, sino de vida y digamos como nos enseña la Palabra de Dios: En ti Señor está puesta mi esperanza, en ti esperaré.
El trabajo de la obra misionera sigue y más aún en estos tiempos esperamos en nuestro Señor Jesucristo con todo nuestro corazón; nuestra esperanza, El es todo para nosotros. A pesar de toda esta situación que se esta viviendo estamos muy agradecidos de Dios, por su provisión y la protección de nuestras niñas en India. Desafortunadamente, ha llegado al país una segunda ola de infección causando una notable alza en los contagios, a pesar de esto, las clases presenciales en la escuela se han reanudado después de un año. Les pedimos sus oraciones en forma especial por esto, pues ustedes comprenderán que si una de ellas se contagia, es muy peligroso para el resto en de las niñas y para los que trabajan en la casa.
Por otra lado, también les quisiéramos pedir su apoyo en oración por la intención que tenemos de realizar una nueva operación de rescate en el mes de abril. Si ya es complejo y difícil sin pandemia, ahora lo es aún más.
No desmayemos y sigamos adelante puesta toda nuestra confianza y esperanza en nuestro Señor Jesucristo; no hay que temer. Saludos y un abrazo a todos nuestros hermanos y amigos que siempre están pendientes y apoyando esta obra de fe.
En Cristo;
Tomas y Simón/